¿Conoces cuáles son las faltas leves y graves más comunes de cometer durante el examen práctico? ¡Descubre cuáles son las faltas en el examen práctico de conducir y evítalas!
Al llegar el momento de presentar el práctico puede que sientas un poco de nervios, pero solo tienes que mantener la calma y saber cuáles se consideran como faltas leves o graves para no cometer ninguna.
Y aquí en Autoescuela Sabadell, te mostraremos cuáles son esas faltas para que podrían hacer que le digas adiós a tu oportunidad de aprobar tu carnet de conducir.
¿Qué tipos de faltas hay en el examen práctico de conducir?
Existen diferentes tipos de faltas que pueden ser cometidas en el práctico:
- Leves: Son aquellas que no representan ningún peligro ni obstáculo para avanzar en el examen.
- Deficientes: Suponen un obstáculo en la prueba.
- Eliminatorias: Son las faltas de peligro.
¿Con cuántas faltas puedo suspender?
Una de las mayores preocupaciones cuando estás en medio de la prueba es qué pasa si acumulas cierto número de faltas. Y la verdad es que dependiendo de la gravedad de las faltas y la frecuencia con las que las cometas, pueden ser o no una causa de que suspendas.
Puedes suspender con:
- 1 falta eliminatoria.
- 2 Faltas deficientes.
- 1 deficiente + 5 leves.
- 10 leves.
Faltas leves en el práctico de conducir
Al momento de presentar tu práctico hay algunas faltas que son consideradas como leves:
- Poner mal las manos sobre el volante y tener una postura incorrecta.
- No comprobar el estado del vehículo antes de ponerte en marcha.
- No regular correctamente los retrovisores.
- No usar el cinturón de seguridad (y ponértelo cuando ya estás manejando es una falta grave).
- No mirar los retrovisores al incorporarte.
- Hacer una incorporación con alguno de los sistemas de seguridad bloqueados como por ejemplo, el freno de mano.
- Avanzar a una velocidad inadecuada.
- No usar señalizaciones o realizar desplazamientos incorrectos.
- Realizar maniobras que sean bruscas, en tanto no representen un peligro u obstaculicen el paso a los demás conductores.
- No observar el estado del tráfico.
- Incrementar la velocidad al ser adelantado por otro vehículo.
- Hacer alguna maniobra con inseguridad.
- Regresar de forma incorrecta al carril derecho, siempre que no sea un peligro y en ningún momento se obstaculice al resto de los conductores.
- En el caso del adelanto, iniciar la maniobra muy lejos.
- No entrar y salir en el tiempo correcto del carril de desaleración.
- Al ser adelantado no facilitar la maniobra.
- Adelantar por el lado de la derecha.
- Detenerse inadecuadamente.
- Olvidarte de la señalización.
- Señalizar de forma incorrecta.
- Al estacionar, no dejar adecuadamente el vehículo inmovilizado.
- Bajarte del coche o abrir la puerta sin mirar la circulación de la vía.
- Demorarte al reanudar la marcha o detenerte cuando un agente de vía libre lo señale.
- Reducir bruscamente la velocidad sin una comprobación previa.
- Rebasar el máximo de velocidad de 10 km/h.
- Detenerse innecesariamente con vía libre por semáforo.
- No respetar las señalizaciones.
- No moderar la velocidad al toparte con luz amarilla intermitente.
- Avanzar sobre líneas longitudinales discontinuas.
- Detenerte sobre un paso peatonal.
- Pasarte las líneas transversales de detención.
- Irrespetar las cuadrículas de líneas amarillas.
- Usar una marcha incorrecta.
- No activar las luces cuando es requerido o no usar las correspondientes.
- No ser capaz de arrancar el motor.
- No desbloquear la dirección del vehículo.
- No quitar por completo el freno de mano.
Faltas graves en el examen práctico
Las faltas graves no son las deficientes, sino aquellas que se consideran como eliminatorias. Con solo cometer alguna de estas faltas graves tu examen podría ser suspendido y reprobar tu oportunidad de sacar tu carnet de conducir:
- Incorporarte de forma que obligues a los demás conductores a realizar maniobras repentinas o frenar con brusquedad.
- Desplazarte como un peligro para el resto de los conductores y los peatones.
- Rebasar el máximo de velocidad de 30 hm/h.
- No adelantar cuando es debido y en lugar de ello, haber reducido el ritmo a pesar de lo que indique el examinador.
- No reducir la velocidad en caso de una situación de peligro.
- No mantener una distancia de seguridad con los ciclistas o peatones ante el peligro.
- No ser capaz de adaptarse a las circunstancias de la vía y del ritmo del tráfico ante el peligro.
- Invadir el sentido contrario sin que la visibilidad sea suficiente.
- Adelantarte al llegar a las intersecciones sin una buena visibilidad para sus proximidades.
- Dejar los refugios a la derecha y circular por sentido contrario.
- Adelantar cuando otro vehículo circule en sentido contrario y exista un riesgo de colisionar.
- Detenerte causando una situación de riesgo.
- Pararte o estacionarte dejando un espacio excesivo del bordillo.
- No obedecer ni respetar ninguna de las señales o indicaciones.
- No respetar los semáforos en rojo ni la luz roja fija.
- No usar el alumbrado adecuado y crear peligro.
- Generar un deslumbramiento.
- No respetar el paso de cebra.
- Rebasar alguna barrera móvil o una semibarrera. Lo mismo aplica para los conos, la línea real o imaginaria que une las banderillas y la que es formada por las barreras de luces amarillas o intermitentes.
- No conocer los sistemas de frenado ni la situación al conducir.
Consejos para no cometer faltas leves o graves
El mejor consejo que podemos darte para que no cometas faltas leves ni graves durante el examen práctico de conducir es que te tomes las cosas con calma. Las ansias y los nervios solo harán que quizá te excedas de velocidad o te olvides de alguna maniobra leve.
Confía en tu preparación y asegúrate de practicar lo necesario antes que llegue el día de la prueba. Además de esto, conocer de antemano cuál será la zona del recorrido del práctico te ayudará a prepararte para enfrentarte con cualquier obstáculo con el que te puedas topar y termines tu examen práctico con éxito.
