Al conducir es tu deber hacerlo con seguridad. Debes pensar en velar por tu integridad como conductor, la de tus acompañantes y el resto de los conductores, es por ello que debes saber muy bien cuando usar las luces altas al conducir.
Una buena visión al manejar es muy importante cuando se trata de conducir de forma segura. Y por ello necesitas conocer cómo funciona el sistema de iluminación de tu coche y qué partes lo componen.
Características del sistema de iluminación del coche
Las características de cada coche varían entre sí. Pero a pesar de que las especificaciones de los vehículos cambian de acuerdo a la marca, por lo general, los sistemas de iluminación están compuestos por ciertos tipos de luces:
- Direccionales.
- De posición.
- Antiniebla.
- Altas y bajas.
- Intermitentes o Hazard.
- De freno y de reversa.
Al manejar debes saber cuándo usar cada juego de luces y saber qué función cumplen las luces altas y bajas específicamente.
Principales luces del vehículo
Cuando manejes usarás tres tipos de luces con mayor regularidad: altas, bajas y de posición.
Luces altas al conducir
Se recomienda usarlas de noche y en carreteras que no tengan buena iluminación. Aunque debes saber cuándo cambiar a las luces bajas si estás deslumbrando a otros conductores que van por delante de ti y los que vienen por sentido contrario.
No olvides que si tu luz le llega como reflejo a otros conductores a través de los retrovisores, dependiendo de la situación, podría causar posibles accidentes.
Luces bajas
Se tratan de las luces que se encienden comúnmente al manejar por la noche y en cualquier vía. Las luces bajas siempre deben estar encendidas ya sea que esté nevando, haya niebla, lluvia o humo.
Estas luces bajas no molestan a los demás conductores, por lo que pueden usarse de día para hacer que tu coche sea más visible.
Luces básicas de posición
Son las luces básicas que siempre están encendidas al activar tanto las luces altas como las bajas. Tienen la función de indicar la posición y el tamaño del coche. Si te detienes no debes apagarlas.
Deben mantenerse visibles, aunque cabe destacar que no sirven para que circules únicamente con ellas debido a que no ofrecen la suficiente iluminación para la carretera.
Luces altas al conducir y bajas: ¿cuál es la diferencia?
A pesar de las diferencias, en algunas ocasiones pueden surgir dudas sobre el uso de las luces altas al conducir y bajas. Pero las bajas son las luces más usadas por los conductores y por ello, se suelen dañar con más rapidez.
Conviene que las revises periódicamente para prevenir su desgaste y que puedas usarlas como es normal durante el día o en una carretera con poca visibilidad. También se surgiere usarlas cuando está lloviendo o pasas un túnel porque su intensidad no molestará a otros conductores.
Por otro lado, las luces altas se usan si vas por carreteras con mala iluminación o cuando necesites distinguir coches u otros objetos que se encuentren a larga distancia. Aunque debes tener más cuidado con el uso de las luces altas para no deslumbrar a los otros conductores.
Además de afectar a otros conductores, si usas una luz con mucha intensidad podría interferir con tu propia visibilidad.
Luces de alta densidad para manejar con neblina
No utilices las luces altas ara manejar con neblina. Si bien las luces altas te permiten ver mejor el camino, cuando hay lluvia fuerte o te toca transitar con neblina, lo ideal es que actives las luces para niebla de alta densidad.
Los faros antiniebla forman parte del parachoques de los vehículos. Al igual que las luces traseras funcionan para que tu coche sea notado, las altas solamente deben ser usadas en casos extremos. Y en algunos casos su mal uso puede ser multado.
Consejos de seguridad al manejar
La mala visión en la carretera es uno de los principales factores que incrementan el riesgo de accidentes.
Puede ser que tengas dificultades visuales para ver en la noche o que el camino no se encuentre lo suficientemente iluminado, pero ambas son situaciones en las que tienes que tomar precauciones.
Aprende cuándo debes usar luces altas, siguiendo algunas recomendaciones de seguridad básicas:
- Intenta no fijar la mirada directamente en las luces de otros coches cuando se acerquen, desviando tu vista hacia la derecha.
- Evita las distracciones y nunca apartes tu atención del camino.
- No caigas en la práctica de poner y quitar constantemente las luces altas para sobrepasar a otro coche.
- Si vas cambiar de carril usa la luz adecuada para indicar tus intenciones a los demás vehículos.
- Al cambiar de carril haz cambios de luz variando la intensidad de media a baja de manera constante para informar a cualquier otro coche que esté en el carril que debe hacer un cambio inmediato.
- No dudes en utilizar las luces para prevenir a otros conductores de posibles accidentes o una situación de riesgo, avisando con un cambio de luces a otro coche que te encuentres por la carretera si anteriormente has pasado algún accidente.
- En los caminos con un solo sentido es muy común que los coches que van detrás de ti tengas sus luces altas activadas, lo que significa un peligro. Así que haz una señal para que las desactiven haciendo parpadear tus propias luces altas.
¿Cómo cuidar las luces de mi coche?
Es fundamental hacer regularmente un mantenimiento de los sistemas de seguridad e iluminación de tu vehículo.
Descuidar el sistema de alumbrado de tu coche es un error muy grave. Unas luces en mal estado generan que tu visibilidad no sea la adecuada, que tu vista se sienta mucho más fatigada e incluso, afectarás la capacidad de los demás conductores para manejar por la carretera.
Si notas que alguno de tus faros tiene alguna rotura o un desperfecto, debes llevarlo al servicio técnico y repararlo lo más pronto posible porque el interior del faro podría condensarse y la bombilla fundirse.
Y recuerda que los fabricantes y especialistas del servicio técnico recomiendan que se debe realizar un cambio de tus luces cada dos años para evitar riesgos de accidentes.