Sufrir de un neumático pinchado es algo muy común, pero si no tomas previsiones este incidente podría convertirse en un verdadero dolor de cabeza.
Y es que cuando vas desplazándote por la carretera siempre corres el riesgo de toparte con objetos punzantes casi imperceptibles, como por ejemplo, trozos de vidrio, clavos o tornillos y tus llantas podrían terminar pinchadas.
Si tu neumático está muy desgastado el riesgo de que se pinche es mayor, por lo que antes de emprender tu viaje hay que hacer una revisión de tus llantas y comprobar que se encuentren en buen estado.
Es muy importante detectar de inmediato si tu neumático ha sido pinchado, ya que habrá situaciones en las que no podrás acudir de inmediato a un servicio técnico.
5 señales de que tienes un neumático pinchado
Cuando tu auto presenta fallas, muchas veces te envía señales que pueden confundirte sobre la causa de origen. Sin embargo, existen cinco señales que te harán saber si alguno de tus neumáticos se ha pinchado y puedas reaccionar a tiempo para prevenir cualquier accidente.
1. Dirección endurecida
Si mientras estás conduciendo sientes que la dirección se endurece (sobre todo si vas a baja velocidad), y que además el volante no quiere girarse, es muy probable de que uno de tus neumáticos se haya pinchado y la presión esté baja, por lo que es momento de cambiarlo.
2. Pérdida constante de la presión de aire
Una señal muy clara de que tienes una llanta pinchada es la pérdida constante de la presión del aire. En el caso de que tu vehículo sea de un modelo moderno, el sistema te notificará de cualquier desbalance.
Pero si se trata de un modelo más antiguo, la única manera de saberlo es que los revises constantemente.
3. Luz de presión encendida
Si la luz de presión de los neumáticos se enciende es un indicativo de advertencia de que algo está pasando con las llantas.
Por lo general, la luz de presión es amarilla y suele encenderse intermitentemente de acuerdo a los cambios de presión.
Pero si permanece encendida y notas una diferencia con el volante, hay una alta probabilidad de que hayas sufrido un pinchazo mientras ibas manejando.
4. Desviación hacia un lado
Cuando el aire se pierde debido a un pinchazo repentino, tu coche comenzará a desviarse hacia uno de los lados del camino mientras intentas mantener la marcha, y entonces corres un gran riesgo de perder el control del volante.
5. Aumento del ruido
Al conducir con un neumático pinchado la pérdida de presión se hará cada vez mayor. Cuando el aire baja en exceso, entonces se produce un ruido que seguirá aumentando si no detienes el coche.
¿Qué debo hacer ante un neumático pinchado?
Una solución de emergencia para un neumático pinchado es que coloques un parche de goma en el interior del neumático para rellenar el pinchazo con caucho.
Aunque no hay que olvidar que esto solo podrás hacerlo si ya conoces cómo realizar el procedimiento y el agujero no es mayo a 6 mm. Si es mayor a esto o tu llanta está demasiado desgastada este truco no funcionará.
También debes considerar que este tipo de procedimiento no puedes realizarlo en cualquier lugar. Pero el primero de los pasos a seguir ante un neumático pinchado es que no debes entrar en pánico.
Mantén en todo momento la cama y toma el control del volante, mientras disminuyes la velocidad y activas las luces de emergencia. El objetivo no es ponerte nervioso por el imprevisto, sino estacionarte en un sitio seguro para que puedas cambiar el neumático sin problemas.
Tienes que disminuir la velocidad para que el vehículo pueda ir frenando solo y una vez te detengas, coloca los triángulos de emergencia.
Es fundamental darle al coche algo de estabilidad y firmeza. Asegúrate de colocar cuñas delante y detrás de los neumáticos que se encentran en buen estado. Ladrillos, trozos de madera o piedras grandes que son fáciles de encontrar en la vía son algunas de las cuñas improvisadas que pues usar.
Pasos para cambiar un neumático pinchado
Para cambiar un neumático pinchado solo debes seguir estos simples pasos y podrás retomar tu viaje sin mayores contratiempos:
- Encuentra el punto de anclaje y pon el gato en posición.
- Levanta el coche manteniendo la presión contra el suelo.
- Para sacar las tuercas tienes que girarlas en el sentido contrario a las manecillas del reloj.
- Retira la llanta pinchada y colócala debajo del lateral con el fin de reforzar el soporte.
- Cambia el neumático por la llanta de repuesto.
- Coloca de nuevo las tuercas, pero sin apretar excesivamente.
- Baja el coche, retira el gato y con la llave de cruz ajusta los tornillos.
¿Cómo arreglo un neumático pinchado?
Si quieres arreglar un neumático pinchado por tu cuenta tienes que conocer un par de procedimientos:
Localiza el agujero
Tienes que localizar dónde está el agujero. Para hacerlo, palpa la superficie así detectarás cualquier irregularidad y luego, retira el objeto causante del daño.
Solución de agua y jabón
En el caso de que el método anterior no funcione, puedes utilizar agua y jabón para dar con el agujero.
Con la solución rocía el neumático y fíjate si surgen burbujas del sitio donde ha sucedido el corte de la llanta.
Arreglando el neumático
Cuando finalmente encuentres el agujero procede a arreglar el neumático pinchado. Hay dos maneras de hacerlo:
- Mecha: Es sencillo, puede hacerse donde sea y funciona a menos de que la llanta esté muy desgastada.
- Parche: Es un procedimiento un poco más complejo y no podrás hacerlo de inmediato en cualquier sitio.
A pesar de conocer estos dos métodos para arreglar tu llanta pinchada, si tu neumático está demasiado roto, el agujero muy cerca del borde o es mayor de los 6 mm. Lo más recomendable es acudir a un centro especializado.
El servicio técnico y el servicio de vulcanización son los profesionales que podrán ayudarte. Aunque debes recordar que si detectas a tiempo los signos de un neumático desgastado, tendrás menos posibilidades de sufrir un pinchazo.