Tras aprobar el examen teórico, llega el momento de tu primera clase de conducir donde estarás ante la práctica y demostrarás gracias a estos Tips para tu primera clase que estás listo para ser un conductor certificado.
Cuando te enfrentes por primera vez a la práctica, ya sea de simulación, en circuito cerrado o en las vías de tráfico abierta, tendrás para guiarte a un profesor que te ayudará con sus indicaciones y consejos en todo momento.
Si cuentas con un profesor en tu primera clase práctica te sentirás con más confianza al conocer estos Tips para tu primera clase y el trayecto será mucho más fácil. Y si sigues los pequeños tips que te daremos en Autoescuela Sabadell para tu primera clase estarás preparado para aprobar.
Prepárate con antelación para el práctico
Antes de que llegue el día del práctico prepárate con la antelación que consideres necesaria para ir sin nervios y con confianza la fecha en la que debes presentar.
Repasa los conceptos de las habilidades y maniobras que deberás demostrar. Familiarizarte con las vías en las que harás el recorrido también te será de gran ayuda.
Antes de la prueba conoce cuál será la ruta y si en esta zona existen algunas dificultades que debes sortear, para que cuando llegue el examen no te tome por sorpresa el tráfico y otros aspectos del entorno donde circularás.
¿Existe una distancia ideal para conducir?
En realidad no hay una distancia óptima cuando estés ante el volante conduciendo, ya que esta dependerá de la persona que maneja, cuál es el tipo de vehículo, entre otras cosas. Sin embargo, existe una recomendación que ayuda a los primerizos en sus prácticas de coche, moto o camión.
La clave está en que los brazos deben estar ligeramente flexionados, porque esto te servirá como indicativo para saber que la distancia entre el asiento y el volante es la adecuada.
Otro truco muy utilizado es complementar la ligera flexión de los brazos con la pierna izquierda en una posición un tanto flexionada, para que así logres manejar el embrague sin problemas.
Distinguir los pedales (Tips para tu primera clase)
Una duda muy común en la primera clase práctica es si será capaz o no de distinguir los pedales. Pero debes saber que usualmente cuando subas a bordo de un coche verás que hay tres de ellos.
Y es allí cuando quizá pienses cómo harás para arreglártelas con tres pedales mientras vas en la vía si nada más tienes dos pies. Pero no hay necesidad de entrar en nervios con este primer vistazo. Simplemente tienes que aprender a identificar cuáles son cada uno de los pedales.
Está el embrague (a tu izquierda), el freno (en el centro) y el acelerador (a la derecha). Podemos decir que el más importante de estos tres y que se convertirá en tu mejor aliado es el embrague.
Y en el caso del freno y el acelerador es fácil distinguir a cada uno porque están a diferentes alturas para facilitar su reconocimiento.
Una relación de amor-odio con el embrague
Muchas de las personas cuando están en su primera clase de conducir suelen tener una relación de amor-odio con el embrague. Pero esto en tu caso no tiene que ser así.
El embrague es un sistema que se acciona con un pedal que sirve para transmitir e interrumpir la transmisión de energía mecánica, controlando en el caso de los coches la trasmisión desde el motor hasta las ruedas.
A pesar de la utilidad que tiene este sistema, en ciertos casos algunos conductores pueden frustrarse un poco por la forma en que funciona al presionar el pedal. Aunque simplemente debes entender que este pedal no funciona con prisas.
Es un sistema que necesita un tiempo específico para responder, por lo que frustrarte por que el motor se acople y desacople con las ruedas porque no es una respuesta a la “velocidad de la luz”, no te llevará a nada y podrías terminar dañando el sistema.
Listo para la circulación
Una vez que te hayas acomodado en el coche y ajustado todos los elementos necesarios para poder arrancar, podrás finalmente circular sin olvidar las normas de tráfico y que debes hacerlo con precaución.
No te agobies porque pareciera que necesitas de “más pies” para poder manejar los pedales. Solamente debes recordar pequeños detalles clave como que usas el pie izquierdo para manejar el embrague y el derecho para el freno y el acelerador.
La combinación de manos al volante y pies en los pedales es algo que requiere de paciencia, y al principio quizá sientas que tus pies y manos están reaccionando por cuenta propia. Pero lograrás adaptarte y usarlos con facilidad para hacer todos los cambios y giros necesarios.
En la primera etapa de la práctica el objetivo no es que lo hagas 100% a la perfección, sino que aprendas a girar con el volante con suavidad y a empezar a conseguir la habilidad integrada de los mandos de tus manos y el “juego de pies” en los pedales.
No caigas en las prisas
Dejarte llevar por los nervios y caer en las prisas lo único que obtendrás es que durante el práctico se te puedan pasar un par de maniobras o que vayas a más velocidad de la que deberías.
Es cierto que debes saber cómo reaccionar adecuadamente y responder a tiempo ante cada circunstancia. Pero tómate las cosas con calma y si te has preparado y practicado con antelación no tendrás dificultad alguna en tu prueba en las vías de tráfico.
Clases prácticas en un coche seguro y moderno
Un último consejo que te será de mucha utilidad es que cuando estés mirando las distintas ofertas de clases prácticas comprueba que la autoescuela elegida cuente con una flota de vehículos para la práctica que esté modernizada.
Realizar tus pruebas en un coche actualizado te permitirá que te sientas más seguro mientras estás conduciendo por las vías de tráfico.
Además de que debes considerar que elegir un vehículo que tenga un modelo similar al que esperas conducir cuando apruebes la licencia, para que así conozcas mucho mejor su funcionamiento.